lunes, 10 de diciembre de 2012

Inversión de futuro


Ante una crisis de autoestima como la que sufre en este momento Gijón, optimismo. «No es tiempo para lamentarse sino para pensar de otra manera», apuntan los expertos. La industria y las nuevas tecnologías marcan el tránsito hacia el futuro del municipio, indican quienes conocen de cerca el territorio, desde el ámbito de la cultura, la economía, las ciencias sociales o la judicatura. Profesionales de diferentes ámbitos con visión estratégica de la ciudad sugerirán en esta serie de entrevistas, artículos de opinión y comentarios que hoy inicia LA NUEVA ESPAÑA cual es la nueva reconversión a la que debe enfrentarse este territorio para salir de la crisis. Gijón, siglo XXI, ¿y ahora qué? Es la pregunta a la que tratan de responder en esta primera entrega el periodista Fernando Losada; el presidente de la Cámara de Comercio de Gijón, Félix Baragaño; el notario Ángel Aznárez o el presidente del Ateneo Jovellanos, José Luis Martínez. Y sus reflexiones, las que siguen.

l Fernando Losada (periodista)

«En un momento complicado para esta y para otras ciudades, el acierto en la adopción de medidas puede ser la clave que marque la diferencia de futuro. Vivimos en una ciudad que se ha reinventado en numerosas ocasiones y que está ahora en una nueva encrucijada. Es la hora de apostar por aquellas cosas en las que nos podemos diferenciar. En unas circunstancias especialmente complicadas para la tradición industrial de la ciudad, tenemos de nuevo que echar mano de la creatividad y la imaginación. No para apostarlo todo a una ciudad de servicios, sino para no perder algunas de las señas de identidad que marcan la historia y el carácter de esta ciudad. No debemos dar la espalda al Puerto, ni a empresas industriales e ingenierías que son referentes internacionales, pero también hemos de reorientar la actividad y abrir paso a otros yacimientos de empleo como la cultura o las relacionadas con las nuevas tecnologías, así como revisar la política de turismo y servicios que presta la ciudad. En definitiva, apostar por el talento.

El futuro, en mi opinión, ha de basarse en estrategias creativas. Y estas estrategias pasan por promover nuevas ideas para el desarrollo de la vida económica de la ciudad. Es importante la creatividad desde la imaginación, pero también lo es el valor en las decisiones. Es tiempo de hacer apuestas, de planificar y realizar acciones que sirvan para reposicionar-redefinir Gijón, perfilar su personalidad con la idea de conseguir una diferenciación con respecto a otras ciudades. Conseguir que Gijón siga siendo una ciudad para querer vivir en ella».

l Félix Baragaño (presidente de la Cámara de Comercio)

«No tenemos que dejarnos llevar por el pesimismo, porque en la ciudad tenemos muchas cosas positivas y debemos potenciarlas. La industria, y especialmente la del metal, es una parte de nuestra economía que tiene un gran futuro. No se va a extinguir porque sea un sector maduro, tenemos empresas líderes mundiales y es una apuesta por la que hay que seguir invirtiendo. Por otra parte, disponemos de todo un entramado alrededor de la "Milla del Conocimiento", la Politécnica con todos los grados que imparte en diversas especialidades, con una oferta formativa de gran atractivo e ingenieros muy cotizados en todo el mundo.

Todo esto, en conjunción con las empresas del Parque Tecnológico conforma un auténtico vivero de nuevas iniciativas, un nuevo tejido en torno a las TIC y las ingenierías que debe contar con el impulso de la Universidad.

Por otra parte, creo que el turismo va a seguir creciendo, aunque quien pensara que el futuro de Gijón era el turismo, se equivocaba. El futuro tiene que pasar por la industria y las TIC, pero sin duda la ciudad va a seguir teniendo un tirón importante. Lo que tenemos ahora mismo es una sobredimensión, un exceso en la oferta que exige un ajuste».

l Ángel Aznárez (notario)

«Soy optimista sobre el futuro de la ciudad por dos razones: porque Gijón es ciudad de gentes mezcladas, una sociedad como "mestiza", y eso es muy positivo porque donde hay mezcla hay vitalidad, y donde hay endogamia hay enfermedad. Por otra parte, está surgiendo una nueva burguesía que promete excelencia industrial y tecnológica (podría dar cuatro apellidos nuevos). La vieja burguesía industrial camina en tránsito acelerado hacia la marginalidad, lo cual es normal, pues nada, a excepción de Dios, es eterno. El futuro de Gijón, como el del país y el de Asturias, está en la industria y en las nuevas tecnologías mucho más que en los servicios y por supuesto la agricultura».

l José Luis Martínez (Ateneo Jovellanos)

«El futuro de Gijón no lo veo muy claro. Hay personas dentro de los grupos políticos que son bien pensantes pero las decisiones no dependen exclusivamente de lo que se haga Gijón sino de otras circunstancias. Vendrán tiempos peores pero no hay que darse por vencidos. El tiempo nos dará la razón. Soy personas que cree que las cosas tienen que solucionarse. Desde mi punto de vista hay una moral bastante enredativa, por no decir nada de los valores que se están perdiendo pero quiero ser optimista y Gijón, que ha sido una ciudad con una industria poderosa en otra época, en no muchos años, dos o tres, volverá resurgir. Gijón ha sido una ciudad donde siempre se pagaron los platos rotos porque había muchos platos que romper.

Sus bases -la siderurgia, la minería, el naval- se han venido abajo y ha habido que reconstruir otro tipo de economía. Los seres humanos estamos acostumbrados a atravesar momentos difíciles pero sabemos sobreponernos. El problema es que hemos perdido la moral del individuo y la sociedad en general lo está pagando. En este momento es necesaria más que nunca la sensatez y ver las cosas poco a poco, dándose cuenta que hay otros caminos. Hay que pensar de otra manera porque ya no sirven las mismas cosas que antes.

Los políticos tratan de defender los intereses de sus respectivos partidos pero dedicarse a la política es dedicarse a la defensa de la sociedad».
«No debemos dar la espalda a El Musel, ni a la industria o a las ingenierías»

Fuentes: http://www.lne.es

No hay comentarios:

Publicar un comentario